Introducir innovaciones tecnológicas en las variedades tradicionales de tomate Muchamiel y de Pera es el objetivo del convenio que han suscrito la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH) y Madeinplant, spin off de la Universitat Politècnica de València (UPV) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
En concreto, el equipo de Madeinplant y la UMH generarán variantes de color y composición nutricional, conservando todas las características de producción, forma y tamaño de fruto, carnosidad etc. que caracterizan a estas variedades tan apreciadas localmente. En la firma del convenio han estado presentes los investigadores del grupo de Biodiversidad Agrícola y Mejora Genética de Variedades de la Escuela Politécnica Superior de Orihuela (EPSO) y profesores del Máster en Ingeniería Agronómica de la UMH, Juan José Ruiz y Santiago García; el director ejecutivo de Madeinplant, Federico Grau; el socio fundador de Madeinplant Antonio Granel; y el vicerrector adjunto de investigación para la gestión de la innovación y transferencia UMH, Javier Sáez.
Por parte de la UMH, en este proyecto colabora el grupo de Biodiversidad Agrícola y Mejora Genética de Variedades de la Escuela Politécnica Superior de Orihuela (EPSO) de la UMH, dirigido por Juan José Ruiz y Santiago García. El equipo investigador de la Escuela trabaja desde hace años con variedades tradicionales de la zona de la huerta de Alicante y de la Vega Baja como la variedad Muchamiel y Pera. Recientemente, han desarrollado líneas de tomate Muchamiel y de Pera con resistencia genética a virus. A través de técnicas de mejora asistida mediante marcadores, consiguieron tomates más resistentes a algunas de las virosis más importantes que afectan al tomate en el sureste de España como son: el virus del mosaico (ToMV), el virus del rizado amarillo (TYLCV) y el virus del bronceado (TSWV). Según explica el investigador de la UMH Santiago García, “con este nuevo proyecto, partiendo de estas variedades tradicionales resistentes, se pretende obtener otras que mantengan la calidad gustativa y que presenten composiciones nutricionales mejoradas, así como una llamativa gama de colores, características todas ellas muy demandadas por el mercado actual”.
“De esa forma, el productor podrá ofrecer un abanico más grande de diversidad, utilizando las mismas condiciones y prácticas de cultivo a las que está acostumbrado con las variedades tradicionales y, por otra parte, el consumidor se podrá beneficiar de unos tomates con una diversidad de colores y composición nutricional en su variedad favorita”, ha destacado el socio fundador de Madeinplant e investigador científico del CSIC en el Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas (UPV-CSIC), Antoni Granell.