Investigadores de la Universidad Miguel Hernández, entre los que se encuentran profesores del Máster en Ingeniería Agronómica, y de la Universidad de Florencia valoran los primeros resultados del proyecto europeo Life. Este estudio, dotado con un millón doscientos mil euros, busca aprovechar los sedimentos marinos de los puertos para ser reutilizados como sustratos agrícolas.